Los consorcios de los barrios cerrados Kentucky Club de Campo, San Marino, Cadaqués y Miraflores de esta ciudad elevaron, junto con un propietario particular, distintos reclamos al municipio en notas dirigidas a la intendenta Mónica Tomei, por falencias en algunos servicios públicos que se prestan en esas zonas.
Los consorcios de los barrios cerrados Kentucky Club de Campo, San Marino, Cadaqués y Miraflores de esta ciudad elevaron, junto con un propietario particular, distintos reclamos al municipio en notas dirigidas a la intendenta Mónica Tomei, por falencias en algunos servicios públicos que se prestan en esas zonas.
En un documento presentado en la Intendencia, el representante de la empresa Administradora de Tierras de Oeste SRL, Juan Félix Rosetti, encargado de la administración de los cuatro countries, procura trasladarle a la intendenta Tomei el “descontento” y las “inquietudes de los consorcistas”, al tiempo que otro propietario residente en el Funes Hill Cadaqués, también efectuó reclamos similares .
En el primer escrito, fechado en enero pasado, se reclama en primer término por los problemas que presenta el alumbrado público en las calles perimetrales de los consorcios, en especial en el tramo de la avenida Fuerza Aérea entre Almafuerte y Rosales. Asimismo, en materia de recolección de residuos, plantean la necesidad de provisión de más contenedores para residuos de mil litros de capacidad y el retiro de los restos verdes de Kentucky.
En los fundamentos de su pedido, los propietarios señalan que “conforman una gran proporción de los contribuyentes de este municipio y por lo tanto detentan el derecho constitucional de ser escuchados y atendidos”, y más adelante reclaman por el riego de calles de tierra, porque la cantidad de polvo suspendido por el tránsito en Almafuerte es “intolerable”, y puede ser causa de accidentes.
También hay reclamos en materia de zanjeo y prioridades en este sentido.
A estos pedidos elevados a la intendenta Tomei, con la que La Capitala intentó infructuosamente comunicarse ayer, se suman los referidos a la necesidad y cuidado de áreas verdes en el sector comprendido por Houssay entre Bordabehere y Güemes, y entre Houssay y Rosales, la pavimentación de diversas arterias y la instalación de refugios para la espera de ómnibus.
Los vecinos consideran indispensable el mantenimiento de algunas obras que, destacan, fueron hechas con fondos privados y luego donadas por los desarrolladores inmobiliarios. También calificaron como exorbitantes las tasas que se cobran por servicios que no se prestan adecuadamente.
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