En estos últimos tiempos, y en medio de un año electoral, los ciudadanos de Funes estamos observando disputas políticas impregnadas de las peores prácticas de la “vieja política”.
Estamos en medio de un fuego cruzado entre el Concejo Deliberante y el Ejecutivo Municipal, llegando al extremo de que hace meses el ejecutivo ha dejado de abonar los salarios de los empleados del concejo y de los concejales, con quienes siempre y en casi todos los temas le ha costado consensuar.
Estos hechos no solo son muy graves porque lesionan principios consagrados en la Constitución Provincial y Nacional sino porque atenta contra un principio consagrado como es la División de Poderes, porque con esta práctica entendemos que el Poder Ejecutivo avasalla, intimida y limita al Poder Legislativo. En este mismo sentido, la Ley 2756, Ley Orgánica de Municipalidades de la Provincia de Santa Fe, dice claramente en su artículo 22 “Cada Municipalidad se compondrá de un Concejo Municipal y de un Departamento Ejecutivo, a cargo éste de un funcionario con el título de Intendente Municipal”. Es decir que sin Consejo y sin Intendencia no hay Municipio.
Por otro lado, este tipo de metodología, que no es nueva en nuestra ciudad, atenta contra los principios de convivencia democráticos. Es intimidar y amedrentar al que piensa distinto. Pero peor aún, es hacer presa a la ciudadanía, necesitada de respuestas a sus inconvenientes cotidianos, de una disputa política en la cual no tiene nada que ver.
Por eso, desde el Partido Socialista, vemos con preocupación estas viejas y reiteradas prácticas y actitudes antidemocráticas, que debemos desterrar definitivamente, porque no solucionan los problemas de la gente y porque dañan tanto a las instituciones como a la ciudadanía.
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