La Empresa Provincial de la Energía (EPE) sigue profundizando los operativos denominados "antifraude", correspondientes a la verificación de anomalías en los clientes de la empresa, tanto para residenciales como comerciales, organismos públicos o privados.
Los controles pertenecen a un operativo que se está desarrollando especialmente en las ciudades de Santa Fe, San Lorenzo y Rosario donde se concentra el 80 por ciento de las pérdidas no técnicas, que la semana pasada tuvieron lugar en el barrio de Fisherton.
Algunos de los operativos realizados esta mañana en la ciudad de Funes se centraron en el radio comprendido entre las calles Fuerza Aérea, Irigoyen, Ruta 9, General López y Alberdi, en el cual se verificaron precintos adulterados, derivaciones, neutros interrumpidos, todos en clientes con posibilidad de pagos.
Los trabajos contaron con la presencia del jefe del Área Control de Pérdidas, Dante Adalia; el jefe Unid Control Pérdidas Rosario, Alfredo Castro; el jefe Unidad de Control de Pérdidas de la Sucursal Rosario Oeste, Néstor Ameglio; Gabriel Navas (legales EPE). Además, también participaron del operativo peritos técnicos de la Universidad Tecnológica Nacional, efectivos policiales y las cuadrillas correspondientes de la empresa energética.
Estas tareas tienen el aval y fueron ordenadas por el ministro provincial de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio, quien pretende mejorar ostensiblemente el recupero de energía consumida y no registrada.
NdB: Que lástima que -tanto en estos casos como en los recientes de Fisherton- no se hagan públicos los nombres de los infractores. Nosotros, los que pagamos hasta el último centavo de lo que indica el medidor tenemos el derecho genuino de saber a quien le estamos subsidiando el consumo de energía.
La energía que se consume y no se paga (se roba), colgándose, adulterando (de cualquier modo) el medidor, etc, la paga el cliente común en sus tarifas.
Todos conocemos algún caso. Algún vecino que sabemos tiene "tocado" el medidor, o que hace algo para pagar menos. Es hora de mandarlos al frente como corresponde.
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