Tras su retirada de La Fluvial, no exenta de polémica, y consolidar Metropolitano, MC Catering vuelve al negocio de las fiestas sociales con “Altos del Ludueña”. El grupo inversor lo encabeza Gonzalo Crespi.
Fuente: Punto Biz
“Nosotros detectamos la tendencia y por eso nos decidimos a invertir en la zona con una estructura vidriada que permite apreciar el campo diseñado por reconocidos paisajistas y vincularse con lo verde”, agregó el empresario al explicar las características del salón en el coctail de inauguración que contó con la presencia de la intendenta Mónica Fein.
El análisis de Cura no puede desprenderse de su retirada de Terrazas de Paraná, el salón concesionado que administró durante años en La Fluvial con ventanales al río en plena costa central. Una salida con polémica ya que salón quedó en manos de Marshall, otro jugador de peso en el negocio.
MC Catering se concentró en la explotación del Salón Metropolitano para los grandes eventos corporativos (ferias y expos como los congresos de Aapresid, Fiar o las cenas de la Cámara de Supermercados) y musicales (recitales internacionales). Consolidado en ese segmento, vuelve ahora al negocio de los eventos sociales como casamientos y cumpleaños y corporativos más pequeños, como la presentación de productos.
En rigor, Altos de Ludueña “es una sociedad de amigos”, como lo define el presidente del emprendimiento Gonzalo Crespi, de Bauen Pilay. Según relata, la idea surgió tras la vuelta de Sergio Ansaldi de Italia adonde había ido a jugar al rugby.
“Cuando volvió, Sergio inició un emprendimiento que no le prosperó y estaba buscando algo para amar. Así los amigos mas allegados empezamos a charlar. Fue ahí que Jorge dijo que necesitaba un salón de eventos y a mí como negocio inmobiliario me pareció interesante, ya que invertí en metros cuadrados para alquilar, en vez de por mes o año, por unas horas para una fiesta”, cuenta Crespi.
Altos del Ludueña tiene capacidad para 500 personas, con un salón principal de 400 metros cuadrados más una terraza techada que suma otros 200 m2, todo con vista al jardín donde también se podrán hacer eventos al aire libre. Además, cuenta con un estacionamiento para 180 autos, laguna, y espacios especialmente diagramados con parrillas y estacadas para ofrecer comidas autóctonas hechas a la vista, además del ya tradicional catering de MC.
Según se pudo ver ayer, toda la estructura está pensada para desarrollar una de las tendencias que se vienen en materia de eventos y que tiene que ver con la “onda campestre y autóctona”. El arquitécto fue Marcelo Villafañe.
¿Cómo viene la temporada? Crespi contó que ya tienen reservas para lo poco que resta del año y que son muy optimistas para el año que viene. “Estamos a metros de la salida de Rosario, pero con un paisaje verde incomparable”, se entusiasma.
De hecho, el corredor de la ruta 9 hoy ya es fuerte en lo que al negocio de los eventos respecta, con tres salones que se reparten la torta: Anabel, Ayres y Tamarindo. Con Altos del Ludueña, se suma un nuevo competidor que apostará a subir el estandard con mucha tecnología.
Por su parte, Cura señaló que “este año pintaba para más complicado por toda la situación política y económica pero el balance final terminó siendo bueno y mucho mejor de lo esperado”. Y con respecto al 2013, estima que los eventos corporativos de mediano tamaño volverán al ruedo con fuerza, luego de un 2012 donde los eventos sociales (casamientos, cumpleaños) fueron los que más movieron el negocio.
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