Viajar en colectivo por la ruta 9 suele ser un mal trago para los usuarios

Los pasajeros esperan la salida de los coches que en algunas
ocasiones ya vienen cargados y no ofrecen plazas libres,
lo que hace que tengan que viajar parados, sobre todo en horas pico.

Por Claudio Berón
Diario La Capital

Plaza Sarmiento Rosario. Viernes, hora pico. La cola de pasajeros para viajar en los servicios de colectivos interurbanos de Monticas y las Rosas es interminable. Quienes tengan 7,20 pesos y suerte podrán viajar sentados en algún tramo y no se sofocarán. Los otros, los que dispongan de menos dinero tendrán que aventurarse a un viaje que, según el destino, la hora, el tipo de bus y el día; puede ser "un infierno". Uno es el servicio semi rápido. El otro, el común.

Las quejas de los usuarios son "todas", como dicen, pero tienen coincidencias: la impuntualidad, los coches "sucios", el aire acondicionado "que no anda", la poca seguridad técnica en viaje y la discriminación en los servicios: el de 7,20 pesos es "casi normal", el de 3,80, "un asco". Un tendal de quejas.

"Hace un año viajé en un colectivo Monticas que sale de Correa a las 20.30 con destino a Rosario. El ómnibus no tenía luz trasera. Un peligro. Avisamos al chofer y nos dijo que iba a dejar una baliza prendida. Es el colmo", dice un usuario en un blog público que funcionó hace un tiempo.

LaCapital viajó el viernes . En el coche andaba un limpiaparabrisas y la noche de lluvia dificultaba la visión del chofer, las cosas no habían cambiado .


Presupuesto

Hora pico. Parte hacia Roldán un colectivo que es como un urbano, pero al precio de un interurbano. "Hace 22 años que vivo en Funes. El viaje en estos colectivos es malo. En el semi rápido se va un poco mejor, pero en el común es imposible. Los trasbordos son habituales. Esta tarde — por el viernes— el que venía de Funes hizo un trasbordo en Córdoba y Carriego, el servicio al cual subimos iba lleno", contó una docente que lo toma ida y vuelta entre Rosario y Funes.

Los costos van desde 1.40 a casi 12 pesos, según cómo y hasta dónde se realice el viaje. Un usuario promedio que viaje ida y vuelta y desee tener cierta seguridad de llegada a destino y comodidad, puede optar por el semi rápido, son 7.20 pesos, al mes suma unos 300 mensuales como presupuesto, esto a partir del último aumento del 20%.

“El semi rápido no para en todos lados y en días feos no es confiable. La seguridad del viaje en el servicio común es muy mala. Hace 15 días tuve un accidente laboral, con una férula el primer viaje lo hice parada. La gente viajaba colgada del estribo, subió un inspector y no dijo absolutamente nada, es un desastre”, acotó la docente.

Otro pasajero cotidiano dijo tener “suerte”, “siempre tomó el semirrápido, que por ahí está sucio”, pero no tuvo mayores inconvenientes. “El común es otra cosa, nunca lo tomo”, dijo Martín, un oficinista que vuelve a Funes siempre cerca de las 18. Es verdad, el común, que cobra entre 3.40 y 5,80 pesos a los lugares más cercanos como Funes y Roldán, es otro viaje. Los usuarios sostienen que “ vas todo apretado, no hay aire acondicionado y parecemos vacas, los choferes frenan fuerte y te vas cayendo”, tal cual lo contó una joven madre que trabaja en Funes.

En la plaza Sarmiento la gente se agolpa. El colectivo de las 17 sale en punto, una hora después estará en Roldán, es semirrápido. El común entra a Funes y hay un servicio que va San Jerónimo y a Correa.


Reuniones

“Sabemos que los días de lluvia hay coches en los que llueve más adentro que afuera”, dijo un concejal en una de las reuniones que intendentes y ediles de Funes, Roldán, Cañada de Gómez, San Jerónimo y correa mantuvieron durante este mes en distintas localidades. La próxima será el 4 de junio en San Jerónimo.

En esos encuentros se apunta a dos cosas: mejorar el servicio e intentar que el aumento del 20 por ciento que sufrió el boleto vuelva atrás. Junto a los dirigentes locales se reúne habitualmente el subsecretario de Transporte de la provincia, Alejandro Boggiano. En esas reuniones se comprometió a entrevistarse con el titular de la empresa Monticas, Alcides Carraro, y dejó en claro que “puede haber otras soluciones y no esperar la licitación de nuevas líneas”.

Las quejas en el blog fueron muchas y actualmente no funciona de la manera que lo hizo en el 2009. Una queja de esa época mencionaba el testimonio de una madre que tenía una nena alérgica a la tierra y en aquel verano tuvo que viajar seguido a Rosario y Santa Fe. “Hemos tenido que nebulizarla intensamente a la llegada de cada viaje porque los acondicionadores de aire no están limpios y circula en los colectivos un aire pesado, que por supuesto la afectó”, contaba. Las cosas al parecer no cambiaron mucho.


Asientos

“Los asientos se te clavan en las costillas y muchos están”, contó una mujer que viaja en varios servicios al día y agregó que “pagamos muy caro por los colectivos que tenés”. Para muestra: el chofer de un semi rápido se refresca con un ventilador adosado en el buche interno del colectivo, como en los antiguos camiones.

Un hombre que habitualmente hace el viaje Rosario-Roldán fue muy específico. “De los horarios, olvidate. La suspensión no existe, se ve que no andan bien los amortiguadores. El de las 19.30 común es un desastre, venís parado y te golpeás. Yo hace dos años que lo tomo seguido y en este tiempo no vi que cambiara nada, parece un camión más que un colectivo”, dijo.

En su momento el tema del blog fueramonticasdela9.blogspot causó una serie de trastornos pero fue un canal de comunicación de los usuarios que derivó en un enfrentamiento entre colectiveros y usuarios.

Ahora, los intendentes toman la posta y la presión de los viajeros comenzó a sentirse como reclamo a la clase política y en la posible inclinación de la decisión del voto en las elecciones de cada una de las localidades