Roldán.— Un episodio tan insólito como confuso ocurrió ayer en esta ciudad cuando la policía intentó detener a punta de pistola al intendente José Pedretti, que fue interceptado por un patrullero mientras se trasladaba con su vehículo oficial en inmediaciones de un barrio de casas quinta. El hecho ocurrió pasada la medianoche y el mandatario local asegura estar atemorizado por el momento que le tocó vivir, al tiempo que denunció lo ocurrido ante el Juzgado de Instrucción Nº 11 de Rosario.
"Como suelo hacer habitualmente, salí a controlar el trabajo de la guardia urbana y cuando pasé frente a una zona de loteos de casas quinta donde se desarrollaba una fiesta, alguien avisó que había un auto sospechoso en la esquina de Talacasto y Humauaca. Entonces llamé a la policía de Roldán a través de mi celular y luego de llegar al lugar observé que el vehículo se dio a la fuga y lo perdí de vista en el barrio Coto de la Alameda", dijo Pedretti, para después comenzar a relatar una historia que aunque parezca de película, fue real.
El arresto. "Como creí que el auto había doblado —añadió— en un callejón sin salida pegué la vuelta y en el trayecto me interceptó un vehículo con luces altas que no tenía sirena ni balizas y de donde bajaron dos policías que me dijeron: «Date vuelta y poné las manos en la cintura»".
Sorprendido por la situación, Pedretti les manifestó a los uniformados que era el intendente de la ciudad, pero no logró que depusieran su hostigadora actitud. "Le dije que se fijaran que el auto estaba identificado como vehículo oficial de la Municipalidad de Roldán, pero hicieron caso omiso y escuché que un agente dijo «esposalo» y el otro me puso el revólver en el pecho, aunque por suerte pude cerrar la puerta. De inmediato llamé al subjefe de la UR-XVII, Ariel Córdoba, para comentarle lo que me ocurría y el trato desmedido de los agentes".
"El comisario –agregó – me pidió que le pasara con los policías pero ellos no quisieron hablar. Entonces salí con el auto, al llegar a una esquina ubicada a unos 30 metros vi a un vehículo que me hizo señas de luces. Luego bajó un agente que me golpeó el vidrio al que le pregunté si no me conocía, por qué intentaron esposarme y me pusieron el revólver en el pecho".
Luego del incidente Pedretti se dirigió hacia la comisaría de Roldán para radicar la denuncia, pero los efectivos le sugirieron "hacer un acta", a lo que se negó, para luego exigir el nombre de los agentes que intentaron detenerlo a fin de denunciarlos ante Asuntos Internos de la Policía Santafesina.
"Al llegar a mi casa —acotó el jefe comunal— un vecino me llamó para decirme que en el barrio estaban haciendo averiguaciones para incriminarme de que había atropellado a una persona".
Acusación cruzada. "Por ese motivo —agregó— intenté contactarme telefónicamente con al jefe de policía de San Lorenzo y su secretaria me dijo que había viajado a Roldán, razón por la cual lo fui a buscar y cuando lo encontré alegó que me acusaban de haber atropellado a una persona".
"Sin embargo –aseguró Pedretti–, luego de hablar con el comisario y explicarle la situación me dijo que convenía dejar todo como está. Entonces comprobé que todo estaba armado, lo cual me indignó y esta mañana (por ayer) radiqué la denuncia ante el Juzgado de Instrucción Nº 11 para que investigue el hecho".
El auto de la Municipalidad local en el que circulaba Pedretti quedó bajo custodia judicial. El mandatario comunal además ofreció su celular para que se periten las llamadas que realizó.
"Como suelo hacer habitualmente, salí a controlar el trabajo de la guardia urbana y cuando pasé frente a una zona de loteos de casas quinta donde se desarrollaba una fiesta, alguien avisó que había un auto sospechoso en la esquina de Talacasto y Humauaca. Entonces llamé a la policía de Roldán a través de mi celular y luego de llegar al lugar observé que el vehículo se dio a la fuga y lo perdí de vista en el barrio Coto de la Alameda", dijo Pedretti, para después comenzar a relatar una historia que aunque parezca de película, fue real.
El arresto. "Como creí que el auto había doblado —añadió— en un callejón sin salida pegué la vuelta y en el trayecto me interceptó un vehículo con luces altas que no tenía sirena ni balizas y de donde bajaron dos policías que me dijeron: «Date vuelta y poné las manos en la cintura»".
Sorprendido por la situación, Pedretti les manifestó a los uniformados que era el intendente de la ciudad, pero no logró que depusieran su hostigadora actitud. "Le dije que se fijaran que el auto estaba identificado como vehículo oficial de la Municipalidad de Roldán, pero hicieron caso omiso y escuché que un agente dijo «esposalo» y el otro me puso el revólver en el pecho, aunque por suerte pude cerrar la puerta. De inmediato llamé al subjefe de la UR-XVII, Ariel Córdoba, para comentarle lo que me ocurría y el trato desmedido de los agentes".
"El comisario –agregó – me pidió que le pasara con los policías pero ellos no quisieron hablar. Entonces salí con el auto, al llegar a una esquina ubicada a unos 30 metros vi a un vehículo que me hizo señas de luces. Luego bajó un agente que me golpeó el vidrio al que le pregunté si no me conocía, por qué intentaron esposarme y me pusieron el revólver en el pecho".
Luego del incidente Pedretti se dirigió hacia la comisaría de Roldán para radicar la denuncia, pero los efectivos le sugirieron "hacer un acta", a lo que se negó, para luego exigir el nombre de los agentes que intentaron detenerlo a fin de denunciarlos ante Asuntos Internos de la Policía Santafesina.
"Al llegar a mi casa —acotó el jefe comunal— un vecino me llamó para decirme que en el barrio estaban haciendo averiguaciones para incriminarme de que había atropellado a una persona".
Acusación cruzada. "Por ese motivo —agregó— intenté contactarme telefónicamente con al jefe de policía de San Lorenzo y su secretaria me dijo que había viajado a Roldán, razón por la cual lo fui a buscar y cuando lo encontré alegó que me acusaban de haber atropellado a una persona".
"Sin embargo –aseguró Pedretti–, luego de hablar con el comisario y explicarle la situación me dijo que convenía dejar todo como está. Entonces comprobé que todo estaba armado, lo cual me indignó y esta mañana (por ayer) radiqué la denuncia ante el Juzgado de Instrucción Nº 11 para que investigue el hecho".
El auto de la Municipalidad local en el que circulaba Pedretti quedó bajo custodia judicial. El mandatario comunal además ofreció su celular para que se periten las llamadas que realizó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario